En 2014, tomé una decisión innovadora. Después de más de 15 años en el mundo de los medios de comunicación, inicié mi propio negocio como fotógrafo. No, por supuesto que no tenía ni idea y un plan de negocios era y sigue siendo una palabra extraña para mí. Lo hice como siempre lo he hecho en mi vida: según mis sentimientos y con mucha energía y trabajo.
Ahora ya han pasado siete años desde ese momento. Mi pastor alemán blanco Rasta me ha acompañado en este viaje durante siete años. Ahora se ha convertido en una estrella de Instagram. Con más de 400.000 seguidores en Instagram, 437.000 seguidores en Tik Tok y unos 50.000 fans en Facebook, su base de fans es bastante decente y... ¡sus fans le adoran!
Pero tampoco tengo que esconderme. 442.000 seguidores de Instagram, 120.000 fans de Tik Tok y pronto 500.000 suscriptores en Facebook hablan claro. En Facebook, sólo este mes he tenido un alcance de 14 millones. ¿Por qué estoy lanzando estas cifras? Porque estoy muy orgulloso de ellos y porque trabajo duro por ellos cada día.
También me hace muy feliz poder trabajar en algo que hace feliz a la gente. ¿Qué puede ser mejor que poder leer cada día lo bien que le sientan a la gente mis fotos y vídeos?
El maldito séptimo año es muy bueno para mí. Me alegro de los frutos de mi duro trabajo durante muchos años y agradezco a todos los socios que me han acompañado o acompañan en este camino a corta o larga distancia.
Pero sobre todo, un gran agradecimiento a todas las personas que me muestran su gratitud cada día. Es vuestra energía la que me hace seguir adelante, la que me impulsa a mostrar algo nuevo una y otra vez, la que me hace avanzar.
Gracias
Sylvia
